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1. La disrupción de la IA ya no es novedad
Hasta ahora, la IA generaba reacciones. En 2026, se espera que empecemos a usarla de forma más estratégica, para rediseñar procesos y modelos completos. En salud, por ejemplo, se aplicarán soluciones que ya han demostrado su efectividad. En marketing, se desarrollarán nuevas formas de llegar al público sin depender de clics. A nivel personal, la IA será clave para liberar tiempo y reducir tareas repetitivas.
2. Los agentes inteligentes se vuelven comunes
Los agentes de IA no solo responden preguntas, también toman decisiones por nosotros. En 2026, se espera que gestionen desde tareas del trabajo hasta asuntos personales, como la organización de una agenda familiar. Las personas aprenderán en qué confiarles y cómo integrarlos mejor en su día a día.
3. La computación cuántica empieza a ser útil
Ya no será solo un tema de laboratorio. Se aplicará en áreas como finanzas (para mejorar análisis de riesgo), salud (para acelerar descubrimientos de medicamentos) y logística (para optimizar rutas y entregas). Aunque no reemplazará la computación tradicional, empezará a mostrar su impacto.
4. La energía se vuelve un tema urgente para la tecnología
El avance tecnológico necesita energía, y el consumo actual no es sostenible. En 2026 se impulsarán soluciones como energías renovables, hidrógeno, biocombustibles y reactores nucleares pequeños. El foco estará en desarrollar infraestructura tecnológica que no comprometa el medio ambiente ni la estabilidad energética global.
5. Lo humano cobra más valor
En un entorno donde la tecnología genera contenido, toma decisiones y automatiza tareas, las cualidades humanas como la empatía, la ética, la creatividad y el pensamiento crítico se vuelven aún más importantes. También será clave formar a los equipos para evitar que queden fuera del nuevo mercado laboral. La innovación no puede centrarse solo en la eficiencia: debe servir para potenciar lo que nos hace humanos.
2026 será un año clave para repensar cómo usamos la tecnología. Las personas y organizaciones que se preparen hoy podrán liderar el cambio y aprovechar el potencial de la IA y otras innovaciones sin perder de vista lo esencial: la visión, el propósito y el valor humano.
Fuente: Forbes
Imagen: Adobe Stock
