Para vincularte con el ecosistema
de emprendimiento e innovación
Jesús Francisco García nació con un defecto cardíaco congénito conocido como tetralogía de Fallot. Con sólo cinco años, se sometió a una operación a corazón abierto en el Texas Children's Hospital para corregir la afección.
La tetralogía de Fallot es la forma más común de cardiopatía congénita cianótica y una de las primeras en ser reparada con éxito por cirujanos de cardiopatías congénitas. Suele diagnosticarse poco después del nacimiento, cuando la piel del bebé aparece azulada o grisácea. Suele haber un soplo cardíaco, que suena como un silbido cuando se escucha con un estetoscopio.
"Después de la operación, llevó una vida normal y tranquila, con mucho descanso, y pudo seguir estudiando", recuerda su padre.
A sus 35 años, la situación de Jesús Francisco cambió radicalmente hace seis años. Empezó a frecuentar los servicios de urgencias por una sensación de fatalidad inminente y ataques de pánico. Esto le llevó a buscar la ayuda de Cecilia Britton en TecSalud.
Britton y su equipo de cardiólogos intervencionistas llevaron a cabo un procedimiento innovador, implantando una válvula Venus P-Valve autoexpandible en Jesús Francisco. Era la primera vez que se realizaba un procedimiento de este tipo en México.
Britton explica que los pacientes operados de tetralogía de Fallot pueden desarrollar posteriormente insuficiencia pulmonar, por lo que es crucial identificar el momento óptimo para colocar una válvula.
La Venus P-Valve trata la insuficiencia pulmonar impidiendo que la sangre vuelva al corazón desde los pulmones.
Fuente: Tec Science
https://tecscience.tec.mx/en/health/mexico-first-self-expanding-heart-valve-implant/